viernes, 24 de septiembre de 2010

el perro del abuelo

Un día de primavera, nació en una tinaja vieja donde dormía su madre, una perra lobo negra, con la punta del rabo blanco. El era único, no tenia mas hermanos.
El abuelo lo miró, poniéndolo boca a bajo y dijo,-- Es macho, puede que nos valga, vamos a ver...-, Después la niña se acerco, y acarició a su madre, que movía el rabo-
 Cogió al  perrito y lo miró como el abuelo, no vió por qué era macho (cuando pasaron algunos años se enteró) y lo colocó a medio metro de su madre.
El perrito se balanceaba, al intentar andar, aún con los ojos cerrados, (tardan una semana en abrirlos) .La madre lo cogió con la boca, por el cuello y se lo acercó, El perrito no tuvo problema para encontrar la teta de su madre. Poco a poco,  fue creciendo.
 Cuando tenía tres semanas, el abuelo se acercó y lo hizo de rabiar con una tela que le gustaba al perrito. El abuelo no se la daba, el perrito la mordió y el abuelo tiro de ella, a lo que el perro respondió con un gruñido enseñando los dientes. Después lo cogió y le dejó la tela.
Le acarició en la cabecita diciendo---buen perro-- se levantó y le dijo a la niña ---
Lo criaremos y nos servirá para el ganado y cuidar la casa ¿que te parece? -
La niña cogió al abuelo de la mano y le dijo--- Abuelo ¿y yo podré jugar con él? --El abuelo la miró y dijo--- puedes y debes jugar con él , para que te quiera y te respete, ahora, nosotros somos su familia, los perros tienen un líder en su manada, en este caso seré yo, pero tu abuela y tú os tenéis que ganar su respeto y eso se logra con disciplina, costumbres y cariño. Nunca le pegues , hablale con firmeza, y haremos de él un buen perro---
 La niña se puso muy contenta y le dijo--abuelo, ahora que se va a quedar con nosotros tendremos que ponerle un nombre... El abuelo soltó una carcajada, --si, ponle el nombre que tú quieras.
 EL perrito creció y lo enseñaron a estar atado durante el día y comer por la noche para que no se fuera de caza y cuidara el gallinero de los zorros- Aprendió a defenderse de otros perros, hasta que el abuelo le puso las carrancas, luego ningún perro se enfrentaba a él, Era el mejor perro que tuvo el abuelo-  Nuca más se llevaron los zorros las gallinas ni  los pavos.
 Una noche se le escaparon las vacas al vecino de al lado y él solito las metió en una cerca que tenia construida el abuelo para meter a sus vacas por el día- Y después que las metió dentro se acostó en la puerta,
 El abuelo al ver eso, llamo a la abuela, para que lo viera y la niña tan bien lo vió. El abuelo desde entonces decía que no le faltaba nada más que hablar y que era más inteligente que algunas personas.
El abuelo le silbaba y acudía de inmediato, siempre moviendo el rabo, y el abuelo le decía---buen perro, buen perro-- ,
 Acompañaba a la abuela a coger espárragos, cardillos y demás plantas silvestre que utilizaba para la comida de sus pavos. En más de una ocasión se presentó con una liebre y la soltaba en la puerta de la casa.
 Le estaba prohibido su entrada, porque era un perro de campo y esos no entran en las casa, tienen sus propias casetas, que el abuelo le había construido debajo de un árbol.
El abuelo tenia tres perros y cada uno estaba en un sitio estratégico  para cuidar los alrededores. Lo que uno no veía, lo veía el otro, era como los timbres de las casas, siempre pendiente.  Atado durante el día porque mordían a la gente que no conocían y los retara mirándoles a los ojos.  Nunca mires a los ojos a un perro que tiene el pelo del lomo erizado, baja la cabeza y míralo de reojo. ¡Nunca corras si el perro ladra y se te acerca, en su mente, si corres le tienes miedo y te muerde seguro y si le miras le estas retando en su territorio, ellos se consideran de la familia de sus dueños y dan la vida por ellos.
El abuelo un día tuvo que ir a conocer a un bebé y se fueron todos durante unas horas, y soltó a un perro que tenia, era negro, sin rabo y no tenia pedigree pero era muy fiel, siempre que andaban de noche los zorros, tan pronto estaba en la ventana del dormitorio del abuelo, como atacando a los zorros y demás depredadores .
A ese perro, lo mataron de un disparo y luego le clavaron una horquilla en la barriga, los muy asesinos. Nunca supieron quién lo hizo.
 Estaba debajo de la ventana del dormitorio del abuelo. Cuando lo encontró,  se arrepintió de no haber soltado a lo otros dos.
 La abuela lloró en secreto en el dormitorio y la niña sintió un desconsuelo como si le hubieran quitado un trozo
Aquel perro lo enterró el abuelo, lo cogió entre sus brazos y se llevó una pala.,A la niña, no se  le permitió verlo. El abuelo  se marchó muy lejos de la casa. Entonces es cuando la niña lloró sin consuelo por ese perro.

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